Aguantar la respiración
Da una pereza increíble
estirar la adolescencia
a lunas de corazones rotos
bolsillos que nunca entendieron nada
y ni media ilusión, media palabra
capaz de levantarte de la silla
o frenarte la taquicardia
No es que no quisiera que fuese así, no es eso
pero es Noviembre
y tiempo de aguantar la respiración bajo el agua
o la escayola del nórdico por los aires, mi pecho
conteniendo cosas que en parte te juraste que a ti no te pasarían,
llevarte las manos a la cabeza, madre mía, cómo se nos pira, madre mía
asustarte, porque has estado dentro de los cuentos
y la impaciencia es pasar el mono entre cartones y bridas
sin electricidad, sin familia
enjuagándote la cara en muebles que en su día brillan
y vaciaron el silencio del papel de plata que ahora tiñe las mañanas,
en el momento crítico dar la cara
no ser un puto hipócrita
y construirte la vida, porque sabes lo que hay
y la verdad
y la mentira,
llamar a los amigos amigos y a los demás muertos de hambre
porque la falta de confianza y las malas artes
están tan a la orden del día
que uno vomita cristal
que yo ya no sé ni cómo decirlo
que como no te andes con ojo
al mínimo atisbo de dejadez o duda
tú también acabarás puteando,
pero no, no habrá Juicio Final
hubo cuando había que decir y nos callamos
y yo ahora no voy a recordar nada
pero sí voy a mandarlo una vez más a la mierda
porque con la bacanal que se nos tiene preparada
que tenemos delante y probablemente no acabaremos de verla entera
joder, coño ya qué manía con estropearla,
es el 3-14 y su falta de honor
es el malqueda que todos podemos y hemos llegado a ser
los monstruos siempre que acechan
las chapuzas de detrás de los arbustos
pues ya lo siento, es la trampa más vieja del mundo
y perdí la cuenta de haber caído desde el principio,
no es ese el lugar de la cabeza ni de la energía
otra vez, las veces que haga falta: a partir de ahora
sólo alegría,
mi gente honesta
mis estrellas
mis manos
mi afonía
Who you gonna run to (Solid Gold)