Bajo las personas que eres
Cómo te lo imaginas,
estamos al borde de la muerte, tenemos que intentarlo, qué harías si fueras tú
qué intrépidas miserias se equivocaron
a por palmaditas en la espalda con absolutos que planteen una minúscula opinión de lo inexplicable como sentencia
en lugar de sentarnos en la encimera de la cocina
disfrutando de todo lo que no entendemos
pero nos hace reír
en qué momento el pensamiento se dio cuenta de sí mismo
y se interesó por materializarse, dejando así de fluir
de volar libre
y pasó a mendigar que su eslogan no pase de moda
adonde nos lleven las olas
el pulso del trance, vivir por vivir
Llevar en casa capucha y mirarnos desde el misterio
pequeños excavadores aceptando el ritmo sensorial
en los pies-nórdico
en los pliegues de las yemas algo de polvo y sudor,
alguna partícula milimétrica como el amor,
volcano como el amor
la Tierra se feminizará, seres de luz y energía
atípicos en uno de los remotos corazones de las ilimitadas hazañas de las galaxias,
dentro de una mota insignifcante de oscuridad
hacernos promesas
una bailarina seduciéndonos que nos guiará
a sitios con los que no habíamos contado,
que nunca habríamos transitado,
acaso no rendirnos a soñar...
dentro te gritas "tú gira"
pero llega muy lento,
el eco lejano de tu león rugiendo
las balas perdidas revotadas de cañones de otros tiempos,
tiempos de leyenda y curanderos,
gentes que ahora meten al talego
está prohibida la fantasía, pero tú giras...
Qué pigmento de café nos salvará
de todo lo que nos hace ir a acercarnos
y en lo que íbamos nos acercábamos a alejarnos de la manera
qué gotita de mi son se filtrará
hasta intuirte el Ahora como privilegio
que se nos escapa en cuanto uno se escapa de ello,
en él se aprende del movimiento
en él conocimiento, desconocimiento, la entretela
del verdadero espectáculo
cómo se va desenvolviendo,
la vida delante la vida detrás, uno es los aplausos
los da uno
y no espera al tiempo ni lugar donde ser el actor principal
el humano perfecto,
debiste ser quien eras
están llenas las alcantarillas, están llenas de intentos
todo lo que decidimos que hicimos mal
en vez de las veces de guardería, una especie de construcción del carácter
sin el cual no tendríamos el buen humor que tanto nos hace falta
para llegar al absurdo, al placer sideral
de querernos
Esta furgoneta por poder puede ir a cualquier parte,
este rescate del viaje
te hará demostrarte de lo que estás hecho,
tu centro
que reacciona igual ante lo nunca visto
siempre sentido
que vivía bajo las personas que eres
bajo las sábanas del inconsciente colectivo bajando el izar de banderas,
tratando de transformar carcelarias en lavanderas
qué habría pasado si te hubieras quedado quieta,
qué alfombra voladora, dime
qué cometa
Me miras y me entiendes, sabes que no quiero la respuesta
no tengo razón sólo la felicidad de mirarte
sin nada que esconder,
que soy lo que piensas,
que estoy dentro tuyo dándote vueltas
qué meridional calamidad verían desde la Era Industrial los extraterrestres desde sus puertas,
qué proyectarán
si nosotros
no damos pruebas
de que podemos hacer algo más que mandar cajitas de aluminio a Marte
y radiar nuestra biosfera
qué pretender del exterior cuando te ha hundido,
qué imposible rencor acumular
si somos ropa en una lavadora gigante, que al tender
se echa a dormir
pero dentro sigue moviéndose, eléctrica
y nunca se seca
hay demasiadas moléculas, y aun así
en lo incorpóreo se haya nuestra esencia,
en lo transparente atrapar
que en lo irresoluble salen las cuentas
tambores de las viejas epopeyas, así me lo imagino
¡sinsentidos cachondeándose de su lógica interna!
luciérnagas de dicha vertiéndonos nobleza
confiándonos su tristeza
apiadándose de nuestros cachitos
Exagerar, divagar profesionalmente, nos pierde el nervio
en el detalle se vuelve a ser pequeño
al recreo
al campo de baloncesto,
a la semilla germen de todo esto,
ahí se vuelve,
ahí en concreto
no hay extremos,
todo está más cerca de lo que parece
conectado por un hilo mágico que crearon con un tridente los dioses del cielo
y desde entonces para que existiera una cosa tenía que existir la otra,
como hermanos gemelos
que se dieron la espalda
y caminaron derecho
hay que encender y apagar el interruptor constantemente,
hay que saltar a la comba con el pie dentro/fuera, nos rodean tantos símbolos
que a veces se nos pasan las señales
y ya no sabemos
ni qué carretera
hay tantos caminos señalizados, y tantas mezquitas, y tantas iglesias
tú eres tu propio mapa
distintas percepciones a situaciones de cualquiera
llegar al mismo punto con otro punto zen en una curva concreta
es un punto extra
Oh montañitas, volver a correr por ellas
tirarnos a hacer la croqueta
juventud para tirar por la borda
y juventud para capitanear tu barco,
experimentando con la verdad*
y averiguando de primera mano qué quieres
para esta inocencia
cuál será nuestra identidad, ahora que todavía somos nosotros
ahora que estamos a tiempo
de no morir
antes de VERNOS
Dejar crecer mi pelo (I-Nesta)
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